La 75ª edición del Giro de Italia se disputó del 24 de mayo al 14 de junio de 1992, con un recorrido de 21 etapas y 3843 km, que se recorrieron a una velocidad media de 37,092 km/h.
Franco Chioccioli, ganador de la edición anterior, partía entre los favoritos, junto a Claudio Chiappucci y Miguel Induráin, dos de los más importantes corredores del panorama internacional de aquellos años.
En la 2.ª etapa en línea, Induráin se hacía con la maglia rosa, tras producirse un corte en los últimos kilómetros. La 3.ª etapa, una contrarreloj de 38 km, sirvió para que el ciclista navarro reafirmara su condición de líder de la carrera.
En la 9.ª etapa se produjo la primera gran selección. El último ganador del Giro, Franco Chioccioli, fue el más perjudicado, al perder casi tres minutos y medio en la meta. El escalador colombiano Lucho Herrera fue el vencedor de la etapa. En la etapa siguiente, Chioccioli, que se encontraba ya a más de seis minutos del líder, se escaparía junto a Roberto Pagnin y Marco Lietti, consiguiendo reducir en unos dos minutos y medio su desventaja.
No hubo grandes diferencias en las dos etapas de alta montaña que atravesaron los Dolomitas, con finales en Corvara Alta Badia y en el Monte Bondone, que se disputaron bajo un tiempo bastante malo. Induráin controló la carrera en todo momento, sin dar ni un segundo de ventaja a sus principales rivales.
La 18.ª etapa fue la más larga de esta edición, con un total de 260 km, durante los cuales fue protagonista el español Ramón González Arrieta, el cual tras marchar escapado durante gran parte de la etapa junto a otros 23 corredores, estuvo destacado en solitario cerca del final de la etapa. Sin embargo, en los últimos dos kilómetros de la ascensión final, fue rebasado por el alemán Udo Bölts, ganador final de la etapa. Arrieta solo pudo ser segundo.
La última etapa fue una contrarreloj individual de 66 km con final en Milán. Demostrando el gran estado de forma con el que finalizaba la carrera, Miguel Induráin ganó la etapa con una gran diferencia, llegando a doblar a su predecesor, Claudio Chiappucci, que había salido tres minutos antes.
Así, Induráin se convertía en el primer ciclista español en ganar el Giro de Italia. Le acompañaron en el podio los italianos Chiappucci y Chioccioli. Aquel año, el Giro vio también nacer a una joven promesa, el ruso Pável Tonkov, 7.º en la clasificación final, que daría mucho que hablar en las futuras ediciones de la ronda italiana.